Por Andrea Molina Secchi, Gerente de Marketing y Comunicaciones HONOR Chile.
En el contexto del Día Mundial de las Telecomunicaciones, es crucial reflexionar sobre el papel fundamental que desempeñan las tecnologías en nuestra cotidianidad y en el avance hacia la reducción de brechas sociales y económicas. Las empresas de telecomunicaciones jugamos un rol esencial en este proceso al ofrecer productos que conectan a las personas y acortan distancias, priorizando experiencias personalizadas, innovadoras, accesibles y seguras.
Nuestra misión de crear un ecosistema de productos inteligentes, poniendo al ser humano al centro del desarrollo tecnológico, contribuye a disminuir la brecha tecnológica, mejorando su calidad de vida.
Entender las necesidades del usuario contemporáneo es crucial para desarrollar dispositivos y soluciones efectivas que impacten positivamente en el día a día de los usuarios, especialmente en un mundo cada vez más interconectado y exigente. En Chile, la demanda no se limita a la conectividad básica; aspiramos a una conexión rápida, confiable y disponible en todo momento y lugar, con el objetivo de atender tanto necesidades de entretenimiento como laborales, garantizando al mismo tiempo la privacidad y seguridad de las personas.
Este desafío implica desarrollar productos innovadores, confiables y accesibles que no solo sean parte de la evolución tecnológica mundial, sino que también estén al alcance de todos. Es esencial adoptar un enfoque inclusivo que permita cerrar la brecha digital y brindar oportunidades equitativas en todos los segmentos.
En línea con el lema del Consejo de la Unión Internacional de Telecomunicaciones para este año: “La innovación digital puede ayudar a abordar los desafíos más apremiantes del mundo”, creemos firmemente que la innovación digital puede ser un motor para abordar los desafíos más urgentes del mundo. Nuestro compromiso radica en seguir innovando y desarrollando tecnología que tenga un impacto positivo y significativo en la vida de las personas, contribuyendo así a la reducción de brechas y a la construcción de un futuro más equitativo y conectado.