Latam Airlines ha anunciado la adquisición de diez aviones Boeing 787 Dreamliner, una decisión estratégica que solidifica su posición como el mayor operador de este modelo en Latinoamérica. Este nuevo pedido responde al compromiso de la aerolínea de modernizar su flota y reducir su impacto ambiental. Con esta ampliación, Latam proyecta contar con un total de 52 unidades 787 Dreamliner para 2030, duplicando la cifra en comparación con los niveles operativos previos a la pandemia.
Ramiro Alfonsín, CFO de Latam Airlines Group, destacó la eficiencia y versatilidad del Boeing 787, subrayando que:
“Este modelo permite al grupo avanzar en crecimiento sostenible al reducir su huella de carbono, al tiempo que impulsa sus operaciones.”
La incorporación de estos aviones representa un avance significativo en la estrategia de sostenibilidad de Latam, cuyo objetivo es posicionarse con una de las flotas más ecológicas de la región.
Mike Wilson, vicepresidente de ventas para América Latina y el Caribe de Boeing, expresó el compromiso de Boeing de apoyar la expansión internacional de Latam. Wilson explicó que el crecimiento de la flota ayudará a la aerolínea a responder a la creciente demanda de viajes y a consolidar sus conexiones internacionales desde centros clave como Santiago, São Paulo y Lima. Este crecimiento en la flota se verá materializado con entregas entre 2025 y finales de la década, lo cual permitirá a Latam operar de forma más sostenible y eficiente en la región.
El Boeing 787 Dreamliner ha sido diseñado para reducir el consumo de combustible y las emisiones en un 25% respecto a otros modelos, un beneficio crucial en la apuesta de Latam por una operación más amigable con el medio ambiente. Esta eficiencia respalda los objetivos de la compañía en un sector cada vez más orientado a la reducción de impactos ambientales, reforzando el compromiso de la aerolínea en sus operaciones a largo plazo.
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