ESET destaca la importancia de la capacitación en ciberseguridad para mitigar los riesgos a los que están expuestos los trabajadores en un entorno digital cada vez más amenazante. Según el ESET Threat Report H1 2023, los ciberataques diarios detectados aumentaron un 4%, alcanzando un promedio de 2.244 en el primer semestre de 2023. En América Latina, al menos el 30% de las organizaciones sufrió incidentes de seguridad, siendo el ransomware la mayor preocupación. En Chile, los ciberataques aumentaron un 30% en el primer semestre de 2024, afectando principalmente a pequeñas y medianas empresas.
Fabiana Ramírez, investigadora de Seguridad Informática de ESET Latinoamérica, afirma:
“Chile es un país donde se está tomando mayor peso en materia de regulaciones, lo que empuja y obliga a las compañías a revelar las vulneraciones. Para atajar a tiempo es necesaria no solo tecnología y soluciones que monitoreen los sistemas en busca de posibles amenazas, sino que una fuerza laboral altamente alfabetizada con los riesgos para evitar ser la ventana o puerta de entrada de los cibercriminales”.
Un estudio de CybeReady resalta que el 90% de los ciberataques exitosos son resultado de errores humanos. Ramírez subraya:
“Las pérdidas monetarias por un ataque digital es de millones de dólares, situación que puede evitarse con el uso adecuado de los sistemas internos, protección responsable de los datos, pero, lo más importante, con conocimiento. Por eso, la inversión en entrenamiento regular es un paso elemental para un buen higiene en seguridad digital”.
ESET sugiere siete prácticas básicas para los colaboradores: evitar correos sospechosos, usar contraseñas seguras, habilitar autenticación de doble factor, evitar redes Wi-Fi públicas, mantener actualizado el software, no compartir información sensible, y reportar actividades inusuales de inmediato. La capacitación continua es esencial, ya que los ataques se vuelven cada vez más sofisticados con el avance de la tecnología.
“La educación en seguridad digital debe ser continua. Los empleados deben estar a la vanguardia de las amenazas cibernéticas para reducir los riesgos que no dejarán de surgir”.