Kaspersky ha detectado un alarmante giro en las tácticas de extorsión digital. El grupo criminal Fog Ransomware, activo desde inicios de 2024 y conocido por ataques a sectores como educación, recreación y finanzas, ha comenzado a publicar en la Dark Web no solo los datos robados, sino también las direcciones IP de sus víctimas.

Este enfoque representa una evolución significativa en el modelo de Ransomware como Servicio (RaaS). Anteriormente, estos grupos aplicaban la táctica de doble extorsión —cifrado de archivos más amenaza de filtración—, pero ahora buscan aumentar la presión psicológica y legal exponiendo información que los hace más rastreables y vulnerables.
Fabio Assolini, Director del Equipo Global de Investigación y Análisis (GReAT) para América Latina en Kaspersky, explicó que:
“La exposición pública de direcciones IP junto con filtraciones de datos podría aumentar la probabilidad de que las organizaciones cumplan con las demandas de rescate en futuros incidentes. Esta táctica también podría ser una estrategia de marketing basada en el miedo”.
Fog Ransomware compromete redes utilizando credenciales VPN robadas y logra cifrar los datos en menos de dos horas. Afecta sistemas tanto Windows como Linux y, con esta nueva táctica, también facilita que otros actores maliciosos aprovechen la información expuesta para lanzar ataques posteriores, como credential stuffing o el uso de botnets.

Para protegerse frente a estas amenazas, Kaspersky recomienda:
- Capacitación en ciberseguridad para los empleados, enfocada en el reconocimiento de amenazas y buenas prácticas.
- Copias de seguridad periódicas de datos y sistemas críticos.
- Soluciones de seguridad avanzadas, como Kaspersky Next EDR Foundations, para detectar y frenar ataques sofisticados.
- Acceso constante a inteligencia de amenazas, como la que ofrece Kaspersky Threat Intelligence, para anticiparse y responder proactivamente a incidentes.
Con este cambio de estrategia, Fog Ransomware marca un nuevo nivel de presión en el ecosistema del cibercrimen, y refuerza la necesidad urgente de fortalecer las defensas digitales.
