En una revolucionaria expedición al Salar de Atacama, científicos internacionales han empleado tecnología de secuenciación portátil para desentrañar la diversidad biológica única de este ecosistema. Este proyecto, encabezado por los investigadores Lara Urban y Matías Gutiérrez, no solo destaca por su avance tecnológico, sino también por su contribución a la comprensión de los impactos antropogénicos en estos hábitats críticos.
Matías Gutierrez, PhD en Biotecnología, comenta su trabajo:
Tomamos muestras de diversas fuentes cercanas al pueblo de San Pedro de Atacama, estas incluyeron muestras de suelo, sedimentos de riachuelos y humedales, así como también en la cercanía de actividad geotérmica. El ADN obtenido de estas muestras y secuenciado in situ da cuenta de la presencia de una gran diversidad de cianobacterias. Las cianobacterias son organismos fotosintéticos que consumen dióxido de carbono y producen oxígeno, teniendo así un efecto positivo para el medio ambiente.
Por su parte, la investigadora Lara Urban investigadora experta en genómica e inteligencia artificial para la salud planetaria, comentó que:
...[]encontramos que tienen similitud con organismos antes encontrados en el mar de China y Japón. Esto tiene dos potenciales significados, uno es que la diversidad microbiológica encontrada en el desierto de Atacama puede provenir de tiempos donde el desierto era parte del mar y que ha evolucionado divergentemente en este lugar, y por otra parte que las secuencias encontradas corresponden a organismos que no han sido previamente descritos, por lo tanto corresponden a nuevas especies.
Tecnología innovadora en el corazón del desierto
El Congreso Futuro 2024 ha sido el marco para esta significativa investigación en el desierto de Atacama. Los científicos Urban y Gutiérrez lideraron una misión que utilizó el MinION, un disruptivo secuenciador de material genético portátil, para realizar secuenciación genómica de tercera generación en el campo. Este dispositivo, que celebra su décimo aniversario, ha sido clave en la revolución genómica y ha sido empleado en escenarios tan diversos como la Estación Espacial Internacional.
El equipo de investigación se concentró en el análisis metagenómico de los sedimentos del Salar, revelando una asombrosa diversidad de cianobacterias. Estos organismos, esenciales para el ecosistema por su capacidad de fotosíntesis y producción de oxígeno, mostraron secuencias de ADN que sugieren la presencia de especies no descritas anteriormente. Los resultados preliminares indican conexiones sorprendentes con organismos encontrados en el mar de China y Japón, lo que podría apuntar a un origen marino ancestral del desierto o a la existencia de nuevas especies evolucionadas de manera divergente.
Esta investigación no solo aporta al conocimiento de la biodiversidad, sino que también resalta la importancia de la iniciativa mundial One Health, enfocándose en la interconexión entre la salud humana, animal y medioambiental. El estudio de estas cianobacterias, en el contexto de la creciente explotación de litio en el norte de Chile, es crucial para entender y mitigar los impactos ambientales de la actividad humana.
Gonzalo Rosas, productor general de Congreso Futuro, enfatiza el éxito del evento en su capacidad de atraer a un público amplio y diverso, interesado en la ciencia y su aplicación en la vida cotidiana. La participación de expertos en inteligencia artificial y genómica, así como la demostración de la capacidad de la IA para replicar seres humanos, destacaron en la última jornada del congreso, marcando un hito en la divulgación científica en Latinoamérica.
¿Cómo crees que el avance en tecnologías genómicas puede contribuir al desarrollo sostenible y la conservación de ecosistemas únicos como el Salar de Atacama?