En el contexto chileno, la reciente aprobación en general del proyecto de ley que regula la IA por parte de la Comisión de Futuro de la Cámara de Diputados ha marcado un precedente importante a nivel local.
Eso sí, expertos indican que las discusiones se siguen ampliando, sobre todo pensando en medidas que busquen restringir la sobre explotación de este tipo de soluciones cuando van en desmedro de la fuerza laboral humana, concepto que se ha venido acuñando como “Robotax”, o sea, un impuesto a los robots.
Según proyecciones de Goldman Sachs Research, división de análisis de diversos mercados de la firma de inversiones, la IA podría automatizar hasta un 25% de las tareas laborales actuales en la próxima década, impulsando un incremento del 9% en la productividad global. Esto, según la consultora, podría observarse en el PIB estadounidense desde 2027, expandiéndose posteriormente a otras economías posteriormente.
En este escenario, Alonso Astroza, Machine Learning Consultant de GeoVictoria, HR Tech chilena especializada en facilitar la gestión y control de asistencia de los colaboradores en más de 40 países, comenta que la discusión sobre un impuesto a la IA debe considerar múltiples aristas. Si bien podría ser una herramienta para mitigar el impacto social de la automatización, necesitamos garantizar que no obstaculice la innovación tecnológica que tanto necesitan las empresas y agrega que:
"[...] el concepto del 'Robotax' propone que las empresas que implementen IA contribuyan con gravámenes adicionales para compensar el impacto de la automatización en la fuerza laboral, donde cuyos recursos recaudados, puedan destinarse a programas que brinden apoyo de diversa índole a quienes puedan verse golpeados por el crecimiento de este tipo de soluciones”.
Peligros de una mala implementación
No obstante lo anterior, el especialista indica que hay ciertos desafíos en este tipo de medidas, que aún deben ser discutidos en profundidad, indica Alonso Astroza y además que:
"[...] un impuesto mal implementado podría desalentar la adopción de tecnologías innovadoras, frenando mejoras en productividad y crecimiento económico, por lo que el equilibrio es un factor importante. Hay que fomentar la innovación tecnológica, pero sin mermar el bienestar social".
En la misma línea, el experto afirma que:
“[...] el debate sobre los llamados "Robotax" debe considerar experiencias internacionales y adaptarse a las realidades locales, relevando aspectos profundos que involucren a todos los actores: gobierno, empresas, trabajadores y academia. Esto con el objetivo de ser crear un marco regulatorio que promueva la innovación tecnológica, mientras se protege el empleo y el bienestar social".
El especialista enfatiza que es fundamental invertir en programas de capacitación y reconversión laboral para que los trabajadores puedan ir adaptándose a los constantes cambios tecnológicos.
“[...] desde GeoVictoria, contamos con un aplicativo de Inteligencia Artificial llamado VictorIA, con el cual masificamos de forma sencilla el control de asistencia de los colaboradores, en tiempo real, implementado por WhatsApp, con el cual se busca optimizar este tipo de labores".
Empleadores y administradores se benefician al tener un marcaje eficiente y los colaboradores reciben un certificado de puntualidad que es cargado a la plataforma LinkedIn, de ahí parte la importancia que el cambio que se genere tanto a nivel de dispositivos como de instrumentos digitales, se conozca la información suficiente para que esto pueda ser adaptado de la mejor manera.