Huawei ha expuesto avances en tecnología 5G Advanced (también conocida como 5.5G) durante el Foro de Banda Ancha Móvil (MBBF) en Estambul. La compañía destacó cómo esta tecnología es clave para la transformación hacia redes optimizadas para inteligencia artificial, y subrayó la necesidad de que los operadores de telecomunicaciones se preparen para esta evolución.
Ken Hu, presidente rotatorio de Huawei, explicó que el 5.5G permitirá el uso extendido de la IA en una amplia gama de aplicaciones, desde computación de borde hasta drones y productividad satelital. Según Hu, la IA tendrá un papel transformador, y será un elemento omnipresente, facilitando la conectividad inteligente en múltiples aspectos de la vida cotidiana y empresarial. Para avanzar en esta dirección, Huawei ha llevado a cabo la primera prueba de 5G Advanced en Malasia en colaboración con Maxis, uno de los principales operadores de la región.
Durante el evento, el CEO de Turkcell, Dr. Ali Taha Koç, destacó la diferencia fundamental entre 5G y versiones anteriores de la tecnología: mientras que 5G es una fase de conexión inteligente, el 5.5G marca un paso hacia la era de 6G, sentando las bases para la conectividad avanzada. Koç enfatizó que 5.5G representa un avance fundamental que ayuda a pavimentar el camino hacia la próxima generación de redes, y que la colaboración entre los operadores y el sector público será esencial para potenciar estos sistemas.
Alex Sinclair, director de tecnología de GSMA, indicó que la simultaneidad en el desarrollo de 5.5G e IA responde a las crecientes necesidades del sector, tales como el uso de la IA en telecomunicaciones para potenciar la computación de borde y optimizar la eficiencia satelital.
Según Li Peng, vicepresidente senior de Huawei, las empresas de telecomunicaciones tienen dos desafíos principales para anticiparse a la era de la IA: preparar las redes con mayor ancho de banda y baja latencia, y usar la IA para optimizar operaciones complejas. Li prevé que, para 2030, la IA personal será parte integral de la vida de las personas, gestionando un flujo de datos exponencialmente mayor y apoyando tanto las actividades domésticas como industriales.
Li también describió el impacto futuro de la IA en la estructura de redes de datos, que requerirá conexiones más rápidas y confiables entre dispositivos y centros de datos, además de tráfico de red más personalizado y fluido. Estas demandas conducirán a redes más avanzadas y personalizadas, preparadas para cumplir con las exigencias de un entorno con más interacciones de IA y computación avanzada.
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