Por Manuel Viera Flores, Presidente de la Cámara Minera de Chile.
Recientemente, hemos conocido el 6° Índice “Señales de la Minería Expectativas de la Minería Chilena”, elaborado por CESCO y VANTAZ Group, en el que dentro de las conclusiones se indica que el alza del precio del cobre, si bien imprime optimismo a la industria, no es suficiente para atraer inversionistas a Chile.
A pesar de que es una buena noticia para el país contar con mayor ingreso de divisas por concepto de venta del metal rojo, debemos preocuparnos de temas que se han venido arrastrando a lo largo de un par de décadas y que, como país minero, nos han hecho perder competitividad, lo que se define en el índice como parte del pesimismo que tiene la industria.
Coincidimos con el estudio que, la estabilidad política y social son aspectos de gran importancia. Sin embargo, aunque se está trabajando en ello, los temas relacionados con los innumerables permisos que se deben cumplir y el hecho de que no existen incentivos para la exploración, juegan en contra del crecimiento económico. Los aspectos mencionados son de gran importancia, ya que para contar con nuevos yacimientos se requieren de nuevos descubrimientos.
Ante esto, como Cámara Minera de Chile hemos indicado que es importante que las autoridades evalúen la posibilidad de generar estos incentivos, los que pueden ser a través de la rebaja en los impuestos, como lo está haciendo Perú.
Lo anterior, ya que requerimos que los productores de cobre aumenten sus niveles de producción, tanto para mantener la competitividad; y como país minero necesitamos que se desarrollen proyectos nuevos. Esto, por la alta demanda mundial que se ha informado, se generará por el cobre y otros minerales críticos para el desarrollo de nuevas tecnologías que permiten mitigar los efectos del cambio climático.
Sabemos que se están realizando gestiones para atraer inversionistas, esto especialmente en lo referente al litio. Esperamos que tanto la reciente gira presidencial a Europa como la visita de la Ministra de Minería a Japón sean el inicio de un gran ciclo de desarrollo en el sector minero, siempre con las reglas del juego claras y con la transparencia de un país que hace las cosas bien y que quiere recuperar su liderazgo en cuanto a producción minera.
Para alcanzar las metas impuestas es importante dar celeridad a los diversos trámites que se están gestionando como, por ejemplo, reducir el número de permisos y la alta carga tributaria; eliminar el comité de ministros que tiene en sus manos el futuro de cada nuevo proyecto; y generar políticas públicas que fomenten la inversión. Para ello, como Cámara Minera de Chile proponemos volver a instalar el DS 600 más optimizado para incentivar las inversiones; además de preocuparse de la estabilidad jurídica y tributaria. Estos son temas que pueden ayudarnos a marcar la diferencia y hacer que aquellos que desean invertir en el país lo hagan.