Chile dio un importante paso para entrar a la vanguardia de las iniciativas sostenibles dentro de la industria de la aviación civil al inaugurar el primer radar del mundo alimentado 100% de energía solar.
En una ceremonia encabezada por el subsecretario para las Fuerzas Armadas, Galo Eidelstein, se dio a conocer que el instrumento, ubicado en el Cerro Barros Arana de Calama, en pleno Desierto de Atacama, es el primer radar de control del tráfico aéreo del mundo alimentado 100% por esta energía y asegurará el control y la vigilancia del tráfico aéreo en el norte de Chile.
Desarrollado por la empresa francesa Thales, para la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), esta estación, que ya se encuentra en funcionamiento, está alimentada a través de 340 paneles solares.
Además, cuenta con un radar primario STAR NG avanzado y eficiente y un radar secundario RSM. Combinados, los radares proporcionan todos los requisitos de vigilancia operativa del control del tráfico aéreo civil y militar, detectando objetivos que se mueven tanto lentos como rápidos, como helicópteros, aviones comerciales y jets.
La estación de radar permite monitorear los vuelos comerciales operados diariamente por la DGAC en el país, brindando mayor seguridad y confiabilidad en sus tareas.